No, no, no, no, no ¡No!, esta idea es demasiado
estúpida. No puedo creer cuanto tiempo perdí pensando en ella, soy un baboso.
Es eso, la idea ha sido tan ininteligible que me siento lleno de baba, como
intocable. En este preciso momento me siento el ser más huevo frito de la
historia… ¿huevo frito? ¿ese es tu mejor golpe, escribanito? Eres la Real
Academia Española en un metro setenta y tres y usas “Huevo Frito”. Candelejón.
No sé cómo llegó ni tengo idea de a dónde pretende ir, pero juro por todo en lo poco que creo que no se la contaré a nadie… es más, ya se me olvidó ¿de qué hablaba? ya ni me acuerdo… ¿A quién engaño? Creo que estúpida no basta, esta idea es como estupidérrima de lo estúpida que es.
No sé cómo llegó ni tengo idea de a dónde pretende ir, pero juro por todo en lo poco que creo que no se la contaré a nadie… es más, ya se me olvidó ¿de qué hablaba? ya ni me acuerdo… ¿A quién engaño? Creo que estúpida no basta, esta idea es como estupidérrima de lo estúpida que es.
Haré algo sencillo: solo olvidaré y haré como si
nunca hubiese querido ser escritor. ¿Qué tan mal abogado puedo llegar a ser? Además,
nadie me conoce nadie se dará cuenta. Mi madre sufrirá, una madre siempre sufre
por los fallos de sus hijos. Mi madre debe ser la última persona a la que le
interesen mis escritos… o la penúltima ya que está mi padre. Bueno,
técnicamente hay muchos seres en el mundo a los cuales no les interesa mis
textos, pero si pienso en eso me deprimiría más de lo que ya estoy, y eso que
me siento en el hoyo, y no estoy en posición de estar más deprimido. Mierda, me
deprimí.
Esta reflexión debe acabar ahora. Una vez que me
baje de este bus ya no habrá marcha atrás y la decisión que tome ahora será una
decisión que me acompañe el resto de mis días. Yo sé que depender de una
decisión tan apresurada suena irresponsable, pero creo que es lo mejor... a
veces.
No soy un buen escritor, ni si quiera tengo ideas
buenas. Está bien, ni si quiera tengo ideas claras, lo admito, pero creo que
darme cuenta de esto es el primer paso, ¿no? Ahora puedo proyectarme a ser un
mejor escritor dentro de los cinco años que dure mi carrera de lo que carajos
quieran en casa. Creo que es lo mejor. Dentro de cinco años seré más maduro y…
alto, con más ¿experiencias? Ok, pensar en mi nuevo futuro me deprime.
Aparentemente no hay otro rumbo para mí. Dos años
antes de dejar el colegio sabía lo que quería. ¿Por qué lo cambiaría ahora? ¿estoy
drogado? Bueno, si… Técnicamente si estoy drogado, fumé un poquito antes de subir,
pero no es a lo que quiero llegar. Una vez escuché por ahí que el sufrimiento nace de la negación de la
realidad y la única forma en la que puedo traducir esto en estos momentos
es en que soy un mal escritor y que chucha pasa con eso, ¿¡ah!? Tengo una vida
para mejorar y será mejor que empiece ahora, no vaya a ser que soy realmente
malo y que una vida no sea suficiente.
Creo que de esto se trata, de tener pésimas ideas,
ya vendrán ideas mejores. Nunca está de más desarrollar una mala idea, nunca
está de más practicar un poco. Creo que me puse mal de manera innecesaria, soy
un candelejón.
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